¿Qué materias primas componen un carro eléctrico?
Un carro eléctrico se compone de una gran variedad de materias primas, incluyendo:
Metales:
Acero: Es el material más utilizado en la carrocería del vehículo, chasis y otras partes estructurales.
Aluminio: Se utiliza para aligerar el peso del vehículo, especialmente en la carrocería, llantas y componentes del motor.
Cobre: Se utiliza para el cableado eléctrico, bobinados del motor y otros componentes eléctricos.
Níquel: Se utiliza en las baterías de ion-litio, que son el corazón del vehículo eléctrico.
Cobalto: También se utiliza en las baterías de ion-litio, aunque en menor cantidad que el níquel.
Litio: Es un elemento esencial para las baterías de ion-litio.
Tierras raras: Se utilizan en los imanes permanentes del motor eléctrico.
Otros materiales:
Plástico: Se utiliza para el interior del vehículo, parachoques, molduras y otras piezas.
Vidrio: Se utiliza para las ventanas, parabrisas y lunas traseras.
Caucho: Se utiliza para los neumáticos.
Materiales sintéticos: Se utilizan para la fabricación de asientos, alfombras y aislamiento.
La cantidad de cada material varía según el modelo del vehículo. En general, un vehículo eléctrico de gama media se compone de unos 1.800 kilos de metales y otros materiales.
Es importante destacar que la extracción de algunas de estas materias primas puede tener un impacto ambiental negativo. Por ejemplo, la extracción de cobalto en la República Democrática del Congo se ha asociado con la explotación laboral y la destrucción del medio ambiente.